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Crítica: "Ocean's 8: Las Estafadoras" de Gary Ross

  • Foto del escritor: Luis Javier Sanchez Gomez
    Luis Javier Sanchez Gomez
  • 21 dic 2018
  • 2 Min. de lectura

Primera vez publicado en Periódico El Mexicano el 14 de junio de 2018.

En la década pasada, Steven Soderbergh dirigió un par de películas palomeras que se convirtieron en las favoritas tanto de la crítica como del público. Basadas en el clásico de 1960, "La Gran Estafa" (2001) y "La Nueva Gran Estafa" (2007) conquistaron las salas de cine con sus grandes cargas de humor, carisma, suspenso y un elenco impecable. Era de esperarse, en ésta época de reboots, remakes y secuelas de viejas franquicias producidas a montón, que éstos exitosos films de comedia/suspenso recibieran una actualización en el presente año; por ello, la película de "Ocean's 8: Las Estafadoras" fue recibida éste fin de semana en las salas de cine mexicalenses.


"Ocean's 8: Las Estafadoras" sigue la historia de Debbie Ocean, hermana del personaje principal de las entregas anteriores e interpretada por Sandra Bullock. Después de salir de prisión con libertad condicional, Debbie busca a una antigua colega, interpretada por Cate Blanchett, para así planear y llevar a cabo un robo de joyería antigua en un museo de Nueva York.


Debido a su premisa, la película promete, más que nada, un momento ameno de entretenimiento cinematográfico a través del siempre bien recibido género criminal, tarea que cumple sin esfuerzo y con gran naturalidad. Gracias a la perfecta química encontrada en la actuación de su elenco, el calculado trabajo de montaje, estilístico diálogo y glamorosa propuesta visual, "Ocean's 8..." atrapa de inmediato al espectador, proporcionando, gracias a la suma de sus partes, una experiencia llena de comedia, suspenso y momentos de astuto entretenimiento cinematográfico.


Sin embargo, el film, al igual que sus predecesoras, no logra sobrepasar los límites impuestos por su respectivo género. Claro, la obra otorga todo lo necesario para garantizar la buena recepción del público y ser catalogada como una excelente película palomera. Debido a ello, a pesar de sus virtudes ya mencionadas, da la sensación de ser una película más que sigue una lista de pasos formuláicos que garantizan el éxito en taquilla, factor que la limitan a ser olvidada rápidamente después de salir de la sala de cine. Fuera de ello, no hay mucho que agregar, el film hace notar de manera sólida sus intenciones sin querer ir más allá del entretenimiento.


En esencia, "Ocean's 8: Las Estafadoras" deja en claro que su único propósito es el de distraer a su público durante los 110 minutos de su duración; labor que cumple de excelente manera pero que no pasará a futuro como una pieza de notable relevancia cinematográfica.


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