Crítica: "Tu Nombre" de Makoto Shinkai

Primera vez publicado en Periódico El Mexicano el 09 de agosto de 2017

Desde los ochenta, con el estreno de "Akira" (1988), la cultura de la animación japonesa ha estado en constante reconocimiento y crecimiento en América. Aunque gran parte de su popularidad se debe al contenido televisivo presentado durante los noventas, el público cinéfilo comenzaba a conocer otra página del mundo cinematográfico y reconocer al animé como un género sólido y artístico con títulos como "Ghost In The Shell" (1995), "Perfect Blue" (1997) o "La Princesa Mononoke" (1997), que a su vez posicionaron a directores como Satoshi Kon y Hayao Miyazaki en la cultura cinematográfica internacional como autores de culto.

Durante la presente década, los fanáticos del cine animé en occidente se han mantenido atentos a cualquier título o autor que proporcione la próxima obra que contenga el mismo impacto cultural que los ya considerados clásicos del género; es aquí cuando un nuevo talento directoral llamado Makoto Shinkai entra en escena. Con una pequeña filmografía bajo el brazo, Shinkai saltó a la fama internacional gracias a su peculiar visión estética y temática, que consiste principalmente en la presentación de un excelente trabajo fotográfico acompañado de temas acerca del amor y el crecimiento emocional desarrollados gracias al diálogo escrito. Su trabajo más reconocido a nivel internacional es su más reciente película, "Tu Nombre", que sido ya considerada un clásico moderno y ha llegado a las salas mexicanas para el deleite de todo fanático de éste joven talento.

El film trata la historia de Mitsuha, una chica criada en un pueblo pequeño, y Taki, un chico que ha vivido en la ciudad de Tokio toda su vida. Esta pareja de adolescentes con vidas muy distintas, sin conocerse uno al otro y de manera inexplicable, intercambian cuerpos y se ven obligados a vivir la cotidianidad del otro. Aunque ésta premisa no resulte innovadora en cuestión cómica, la astucia puesta en el diálogo y el complejo trabajo de montaje presentado se encargan de que elementos narrativos básicos, como el contraste cultural entre los personajes y su urgencia por resolver la confusión, se perciban de manera fresca y efectiva. Por ello la película establece en primera instancia como una hilarante comedia juvenil.

Sin embargo, lo ya mencionado resulta ser una mera carta de presentación ya que, con cada escena que avanza, la película comienza a desenvolver su verdadero rostro y demostrar que, detrás de las risas y el humor, se esconde un concepto más profundo y complejo. Poco a poco, la ligereza escrita de la comedia situacional es suplantada por guion de fuerte carga conceptual y el genérico trabajo fotográfico de la animación se torna elaborado y dramático; proporcionado así una convergencia entre historia y deleite visual que crean una experiencia cinematográfica tanto intensa como emocional para todo público.

De igual forma, parte de la fuerza emocional que conlleva "Tu Nombre" es el importante énfasis que la historia le da al concepto del tiempo y su impacto en el desarrollo de las relaciones humanas. Mitsuha y Taki, conforme avanza la trama y se complica su situación, comienzan a formar una profunda amistad. Para ambos, la distancia y la incapacidad de poder conocerse en persona deja que el tiempo pase y su relación se deteriore llegando al grado de ser uno al otro tan solo un recuerdo. Un melancólico y efectivo discurso que llega a conmover hasta al más cínico espectador ya que habla en un nivel personal; habla de la urgencia de cada individuo por mantener vivos, por cualquier medio posible, los recuerdos de nuestras relaciones pasadas y evitar que cada ser querido importante en la vida se convierta en un simple evento esporádico sin nombre.

Con todo lo ya mencionado, no queda más que decir que “Tu Nombre” posiciona a Makoto Shinkai como un indudable autor cinematográfico moderno. Una excelente pieza de entretenimiento y análisis cinematográfico apto para todo fanático de anime y cinéfilo exigente. Por el momento, el público se mantiene expectante al próximo film de este talentoso y joven director japonés.