Crítica: "Aliados" de Robert Zemeckis

Primera vez publicado en Periódico El Mexicano el 17 de enero de 2017

Zemeckis es uno de los directores más reconocidos y respetados de la industria. Su reconocida filmografía durante los años ochenta y noventa, abarcando desde “Volver Al Futuro” (1985) hasta “Náufrago” (2000) lo ha catalogado como un excelente cuenta cuentos cinematográfico gracias a su talento en el aspecto técnico y calidad actoral. Hoy en día, al concentrarse como productor, su trabajo directoral ha pasado desapercibido por el público en general ya que su propuesta cinematográfica se ha alejado de las narrativas que lo hicieron famoso. En la década pasada, se notaba una urgencia por aprovechar la animación por computadora, véase “El Expreso Polar” (2004) como ejemplo, y durante los últimos años se ha dedicado a realizar films, como “El Vuelo” (2012), que contienen cierta complejidad dramática. “Aliados”, siendo su más reciente entrega, queda corta en comparación a su extenso y reconocido trabajo.

Es de reconocerse que el aspecto más fuerte de éste drama ambientado en la segunda guerra mundial es su calidad visual. Desde las primeras escenas, la presencia de un excelente trabajo fotográfico, el respeto a la arquitectura europea de los años cuarenta en la dirección de arte y el llamativo diseño de vestuario, logran una convergencia en la que el espectador se envuelve fácilmente en el contexto histórico. No importa con que cristal se mire, el equipo producción cubre todos los aspectos visuales para ser una reproducción fidedigna de la sociedad europea durante el gran conflicto bélico.

Sin embargo, “Aliados” puede ser catalogada como un film de cáscara vacía ya que sus carencias narrativas no llegan al nivel de su calidad visual.

Mientras el film avanza, se hace claro el descuido de dos características importantes, el ritmo narrativo y el tono. Al tratarse de una historia de espionaje, la trama se toma su tiempo para poner sobre la mesa los elementos con los que jugará el resto del film. El trabajo de montaje y la escritura del guión se encargan de ello manteniendo una tensión y curiosidad constante en el espectador. Sin embargo, la aceleración esporádica de estos elementos cambia drásticamente la propuesta narrativa. De ser un film que propone una trama inteligente y lenta, sin avisar cambia a un escenario en el que la violencia y la adrenalina toman el control de la situación durante un muy corto periodo de tiempo. Éste tipo de cambio se presenta constantemente a lo largo de le película dejándola sin una identidad narrativa sólida.

A la vez, dentro de éste desequilibrio, el guión pretende involucrar elementos de un drama romántico haciendo así aun más complicada su construcción. Llega un punto en el que no queda claro que propuesta es la indicada para ver el film, ¿es un thriller de espionaje, un film de acción intenso o un cautivador romance? Ésta incompatibilidad hace que la película termine siendo una experiencia insípida para el fanático cinematográfico.

Se puede llegar a la conclusión de que la existencia de “Aliados” es por meras intenciones comerciales ya que no cuenta con algo innovador o relevante para la cultura cinematográfica. Será dejada atrás y olvidada al poco tiempo que abandone las salas de cine.